La oferta gastronómica que las costas andaluzas nos ofrecen va desde los llamados chiringuitos de playa, repartidos a lo largo de todo el litoral, hasta llegar a la más alta cocina elaborada por cocineros de conocido prestigio.
Es indiscutible que tanto el turista local como el guiri (llamado turista de habla no hispana), son atraídos por la calidad y variedad de nuestra oferta culinaria. El guiri muere por una paella y el españolito de a pie lo hace por un espeto de sardinas. Sin desmerecer, uno puede comerse un plato de boquerones fritos por 10 euros o si lo prefiere, y su bolsillo es más holgado, unos langostinos y cigalas no se saldrán demasiado del presupuesto...
Los llamados chiringuitos de playa han evolucionado, de ser unos “chambaillos” apostados en la arena han pasado a ser verdaderos restaurantes de primer nivel, eso sí, de “pescaíto” frito, paella, gazpacho etc…
Como se dice, “hay gustos para todo” ah… y también bolsillo que lo resista.
Para esto la Costa del Sol, precisamente Marbella, cuenta con cocineros de primera línea, reconocidos Chef galardonados por la prestigiosa Guía Michelín, con nombres como Dani Garcia, Diego del Río, Victor Trochi y Daniel Rosado, que son un referente.
Ahora sí, la alta cocina como reclamo turístico, con Marbella como epicentro, irrumpe con fuerza queriéndose convertir en un referente en el sur de España.
“Es bien sabido, que de bien nacido es ser agradecido”. Tenemos en las mesas de esta nuestra tierra andaluza los mejores manjares del mundo, así que comamos y bebamos…
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